Notas |
- JUAN BAUTISTA DE ITUARTE fue bautizado en Abando, en la parroquia de San Vicente, el 12-II-1767. A fines de ese siglo alejóse definitivamente del terruño. Dedicado al comercio vino al Río de la Plata como socio o interesado en los negocios de Anselmo Saenz Valiente, quien pronto sería su concuñado. Una de las primeras constancias de la presencia de Ituarte en América, se encuentra protocolizada a raíz de ciertas actuaciones llevadas a cabo en 1795 por un grupo de comerciantes - él entre estos - que se reunieron en Potosí a fin de establecer un reglamento para los "situadistas"; es decir, para aquellos conductores de encomiendas y caudales que, periódicamente hacían la carrera de ida y vuelta del Alto Perú a la capital del Virreinato. Años después, el 17-XII-1798, en la Catedral de Buenos Aires, el presbítero Francisco Tubau, bendecía el enlace de Juan Bautista de Ituarte con María Magdalena de Pueyrredón y Dogan, ante los testigos Anselmo Sáenz Valiente y Rita Dogan, cuñado y abuela de la novia respectivamente.
Ante la segunda arremetida inglesa
En 1807, don Juan Bautista fue elegido Regidor del Cabildo porteño y Defensor de Pobres. Seis meses más tarde - con sus colegas de capítulo presididos por el Alcalde Alzaga - dicho "defensor" no lo sería ya de pobres sino de todo el vecindario porteño, frente a un ejército británico que lo atacaba por segunda vez. En tan críticos momentos, la campana del Cabildo redobló llamando a "generala", y el pueblo se concentró en la Plaza; mientras Liniers salía al encuentro del enemigo que le dispersó la tropa en los corrales de Miserere. Los señores del Cabildo, entretanto, prepararon a la ciudad para resistir. Calle por calle, casa por casa, azotea por azotea, escollos fueron en el trayecto por donde las columnas invasoras se lanzaron al asalto. Pero antes del ataque los regidores Juan Bautista Ituarte y Manuel Ortiz Basualdo, junto con el Síndico Esteban Villanueva, tomaron eficaz y rápidamente medidas a fin de que no les faltaran las vituallas más indispensables a los hombres aprestados para el combate. Y en el glorioso atardecer del 5 de agosto, el General Withelocke rendía su espada y era obligado a evacuar estas regiones del Río de la Plata; y en carta al Almirante Murray, el vencido no ocultó su melancolía al estampar el siguiente párrafo; "Sudamérica jamas podrá pertenecer a los ingleses, la obstinación de todas las clases sociales de sus habitantes es increíble ...".
Lograda la hazaña, dióse rienda suelta al regocijo, y llegaron los premios y se solicitaron los honores. Con el nombre de "Regidor Ituarte", el municipio bautizó su vieja calle de "San Isidro" (hoy Estados Unidos); como asimismo para don Juan Bautista y sus colegas capitulares, el Virrey Liniers se empeñó el 7 de agosto, por carta reservada al Príncipe de la Paz, en pedir se les otorgase a ellos la Cruz de Carlos III, "pues siendo todos como he dicho - le expresaba Liniers a Godoy - de las principales familias de esta ciudad, quedarían igualmente premiados y sin motivos de displicencias". (Por su parte Alzaga, Lezica, Sáenz Valiente y Villanueva, aspiraban a sendos títulos de Castilla).
Ante la revolución emancipadora de los criollos
Tres años más tarde, Juan Bautista Ituarte concurrió al histórico Cabildo abierto del 22-V-1810, a partir del cual habría de cesar para siempre en el país la dominación española. Llegado el turno que correspondía a su voto, mi 4º abuelo no se encontraba en el recinto; seguramente retirado disconforme con el giro que tomaban los acontecimientos. Con todo, al crear después la Junta revolucionaria la Biblioteca Pública, el hombre efectuó un donativo de 103 pesos y 6 reales, cual se lee en La Gazeta del 15-XI-1810, que aún redactaba Mariano Moreno. Más tarde (8-VIII-1811), Ituarte donó a la referida librería, las Cartas de Foronda sobre Economía Política, - "Foronda" era el seudónimo que usaba el economista italiano contemporáneo Juan Valentín Matías Fabbroni (1752-1822) en sus escritos polémicos favorables al libre cambio.
Aquella revolución de los criollos, iniciada en 1810, le trajo muchos trastornos a nuestro comerciante vizcaíno. En los primeros tiempos su parentesco político con Pueyrredón le sirvió de garantía ante los gobiernos patrios. Pero cuando don Juan Martín cayó con el Primer Triunvirato, un grupo de exaltados irrumpió, la noche del 8-X-1812, en la vivienda de Ituarte a la pesca del Triunviro en desgracia (que se había refugiado en casa del cura Marcos Salcedo), y con espadas y puñales pincharon los colchones de las camas por si Pueyrredón estuviera escondido debajo de alguno de ellos. Debido a esto, mi antepasado se hizo sospechoso, fue objeto de vigilancia, y el nuevo gobierno le castigó con multa tras el arribo al puerto de Montevideo, sin permiso de las autoridades bonaerenses, de su fragata "San Anselmo", corrida por un temporal.
Siete años más adelante - ya alejado Pueyrredón del cargo de Director - La Gazeta publicó el 8-XII-1819 una Relación de individuos que embarcaron en Montevideo bajo prisión, el 27 del mes anterior para España: militares, eclesiásticos, comerciantes, entre los cuales don Juan Bautista. Allá en la Península el hombre se estuvo un tiempo. De regreso a la tierra de sus hijos y de sus intereses, murió ahogado - cayó o se tiró al agua desde la nave en que venía como pasajero. El inventario y tasación de sus bienes sucesorios realizóse en 1831; ascendía el haber a 35.788 pesos y 4 3/4 reales, último resto de su fortuna amenguada por los vaivenes revolucionarios argentinos.
Un tocayo imprevisto de mi antepasado Ituarte
En tiempos en que vivía en Buenos Aires mi 4º abuelo Juan Bautista de Ituarte, nacido en 1764 - como sabemos - en la localidad de Abando, a las afueras de Bilbao, capital de Vizcaya, estaba también avecindado en la ciudad porteña otro Juan Bautista Ituarte, nativo de la villa guipuzcoana de Deva; hijo de otro Juan Bautista Ituarte y de María Angela Sigarán. Dicho Juan Bautista Ituarte se casó entre nosotros con María de los Remedios Arévalo y San Miguel, en la que hubo 3 hijos; Juan José Antonio; Francisca de Paula, mujer de Mariano González; y Faustino Ituarte Arévalo. Ello se desprende del testamento del referido Ituarte, otorgado acá el 9-IV-1804, ante el Escribano Mariano García Echaburu, en su Registro nº 3. Ese personaje no pudo ser sinó Juan Bautista Ituarte, alias "Vizcaíno" (aunque precisamente era de Guipuzcoa), "banderillero" o "rejoneador a pié" por los años de 1759 hasta 1772 en la Plaza de Toros del barrio de Montserrat, cual lo estampa Juan Antonio Pillado en su Buenos Aires Colonial. Por lo demás, el hijo primogénito del nombrado toreador debe de haberles dado bastantes "rejonazos" a los ingleses en 1807, según declaró su comandante con estas palabras; "Juan Ituarte se ha distinguido en varias acciones, como fue en la partida de observación al enemigo, en la rendición de una columna de éstos compuesta de más de doscientos hombres, y en el ataque de la Residencia". (Ver en el Archivo General de la Nación; Invasiones Inglesas: Solicitudes, Pasaportes y Nombramientos. Libro 8, informe 74). En cuanto al hijo menor del antiguo torero; Faustino Ituarte, se retiró el 20-XII-1820, inválido, como Cabo 1º del Batallón de Artillería de Buenos Aires. (Libro de Tomas de Razón de Despachos Militares).
por Carlos F. Ibarguren Aguirre
- AGN: Expedientes relaciones con Juan Bautista Ituarte.
Juan Bautista Ituarte: Juicio en su contra por cobro de impuestos de tabacos y naipes. Legajo 13 Expediente 298. Año 1783.
Juan Bautista Ituarte: Y otros piden la reforma del reglamento que rige las elecciones de situadistas. 1798. Comerciales Legajo 18 Expediente 5
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